bueno les trigo esta informacion muy interesentante sobre la historia de los canarios y la canaricultura espero sea de su agrado...
HISTORIA DE LA CANARICULTURA (1ª PARTE)
Esta apasionante historia comenzó allá por el siglo XIV, cuando unos marinos genoveses descubrieron un grupo de trece islas, situadas en la costa noroccidental de África, aproximadamente a un centenar de kilómetros de la misma. Estos primeros visitantes de las Islas Canarias, llamadas también las Islas Afortunadas, encontraron una riqueza natural exuberante y repararon en una pequeña ave de color verdoso que poseía un canto muy melodioso y que se parecía bastante en su aspecto exterior a un verdecillo, con el que está emparentado, si bien, éste posee un plumaje en el que resalta más el color amarillo de fondo.
Mapa de las Islas Canarias.
El canario silvestre es un ave granívora que posee estrías negro-parduscas muy abundantes, tanto que tapan casi por completo su color de fondo, el amarillo. El naturalista Carlos Linneo fue el primero en establecer la clasificación taxonómica del canario, que trataremos en otro artículo, y que dejó encuadrado a nuestro pajarito dentro del Orden Paseráceos, en el Género Fringilla y en la Especie Fringilla canaria (clasificación que ha sido modificada posteriormente, siendo la Especie actualmente Serinus canaria ).
Carlos Linneo, padre de la nomenclatura científica
De esta forma, el canario empezó a ser conocido en Europa, pero su fama parte de las cortes, ya que los Reyes europeos fueron los primeros en poseer esta avecilla. En 1402, el navegante francés Juan de Bethencourt ocupó las Islas Canarias y a su regreso trajo de regalo a Enrique III de Castilla un canario como obsequio para solicitar su protección y ayuda.
Juan de Bethencourt
Enrique III de Castilla
A partir de la ocupación definitiva, por parte de los españoles, de las Islas Canarias - que ocurrió entre 1402 y 1496 - se produjo un gran auge de los canarios en Europa. Los españoles se dieron cuenta de que este pajarito se reproducía sin ningún tipo de problemas en cautividad y decidieron que, debido a la gran demanda que existía ya en las Cortes extranjeras por tener uno de esos canarios, tenían que tomar la medida de exportar únicamente machos para canto y quedarse con todas las hembras, para así mantener el monopolio del floreciente negocio.
Pero, a finales del siglo XVI, ocurrió que un barco que venía cargado de canarios desde las Canarias naufragó cerca de las costas de la isla de Elba (situada al oeste de Italia), quedando libres una gran cantidad de machos y hembras de nuestro pajarito, los cuales se adaptaron a la vida en libertad en la citada isla.
Isla de Elba.
A partir de la captura de estos canarios por parte de los italianos comenzó en Europa la verdadera expansión de nuestro protagonista. Los comerciantes de Italia llevaron sus aves a la región del Tirol (El Tirol es una región alpina trilingüe - alemán, italiano y ladino - de Europa, actualmente dividida entre Austria, Tirol del Norte y Oriental, e Italia, Trentino-Tirol del Sur), Suiza, Bélgica, Francia, Holanda y otros países tan alejados como Egipto o Rusia. Hasta hace pocos decenios los mejores criadores del mundo se encontraban en la zona del Tirol y en Alemania, posteriormente, Reino Unido y Francia tomaron mayor protagonismo, con la creación de un buen número de razas, principalmente de canarios de postura. Pero, como iba diciendo, el primer gran centro de cría estuvo en el Tirol, siendo muy famosa la aldea minero-campesina de Imbst, desde donde salían los canaricultores con sus cuévanos llenos de canarios para venderlos en las ciudades que iban visitando y donde también realizaban compras de otros ejemplares que incorporaban a sus criaderos.
Ya en el siglo XVII, aparece un nuevo gran centro de cría de canarios en Nuremberg (es una ciudad de Baviera, Alemania, a orillas del río Pegnitz en Franconia central), donde se criaban millones de aves cada año por los artesanos del lugar, obteniendo pingües beneficios; tanto, que los comerciantes de otras localidades hacían pasar sus animales como originarios de la ciudad de Nuremberg para poder venderlos a mejor precio. Este hecho obligó a las autoridades de la época a dictar severas leyes para evitar dicha práctica deshonesta.
Precisamente fue en esta época, en Alemania, concretamente en el año 1670, cuando en un criadero de canarios se produce la primera gran mutación del color ancestral. Por inhibición de las melaninas del manto surgieron los canarios amarillos, denominados también pájaros azucarados, que gracias al esfuerzo de los criadores, que supieron ver en él una nueva oportunidad de negocio, consiguieron fijarse como una variedad estable.
Una vez que el canario conquistó Europa, los criadores no tardaron mucho tiempo en darse cuenta de la plasticidad a la hora de aprender el canto que poseían estos pajarillos, ya que solían imitar los sonidos que oían con mucha frecuencia. En las Cortes aparece la profesión del preceptor de pájaros, señor que iba de capital en capital instruyendo a los canarios de las personas pudientes para el canto, con flautas y caramillos, además de con el canto de los ruiseñores.
Caramillos.
A partir de la primera mutación del color se fueron sucediendo en el tiempo otras muchas, hasta conformar la gran variedad de canarios que existe hoy en día. Las mutaciones, que fueron siendo cuidadosamente seleccionadas y fijadas por la mano del hombre, afectaron, además de al color del canario, a su forma, posición, estructura de las plumas y a su canto.
Como ya apuntamos anteriormente, los canarios fueron instruidos para el canto por profesionales en ese arte, lo que repercutió beneficiosamente en la cantidad y variedad de notas distintas que podía emitir nuestro pajarito, surgiendo con el tiempo algunas razas distintas de canarios de canto, según las notas que predominan en su repertorio.
Una de las más populares es el canario harzer roller, cuya historia comenzó por el tesón de un zapatero montañés que habitaba en Harz (Alemania), y que consiguió enseñar a su canario un canto rulado que los mineros austríacos se encargarían luego de perfeccionar hasta el virtuosismo. Los mineros utilizaban los canarios con dos finalidades muy distintas: la primera era la cría, que utilizaban para liberar el estrés que le producía su duro trabajo en la mina, y la segunda era una razón de supervivencia, como era constumbre, los mineros solían llevar a la mina a ejemplares viejos de canario para detectar la presencia de gases tóxicos en el interior de las galerías; así, cuando el canario moría, los mineros abandonaban rápidamente la mina para salvar su vida.
Y os preguntaréis qué pasó con el canario ancestral en su hábitat natural, pues bien, actualmente el canario silvestre continúa siendo bastante frecuente en las islas de Gran Canaria, Tenerife, y también en las Islas Azores y la isla de Madeira. En el campo, el canario encuentra un clima muy benigno para la reproducción, lo que le permite sacar hasta cuatro puestas de entre 3 y 5 huevos al año. La alimentación natural de estos animales son las verduras y semillas silvestres, y en la época de cría, para facilitar el desarrollo correcto de los pichones, la enriquecen con algunos insectos. Los canarios capturados hoy en día en libertad se aparean sin problemas con los ejemplares domésticos.